lunes, 14 de diciembre de 2015

Exaggeration (?)

My heart beats fast.
My lungs breath hard.
My mind wanders far.
My body's stiff.
My head's spinning,
My feelings are heavy.
My words feel weightless.
Feels like I'm doing everything at the same time and that I'm here without being.
Or is it just senseless?
Is it my imagination?
Is it my exaggeration?

Maybe feeling everything so deeply as I always have can be both a blessing and a curse.
Maybe. Just maybe.

domingo, 22 de noviembre de 2015

Lose myself in myself



I want to experience freedom as it really is: Without chains.
I want to travel the world and loose myself in every part I visit.
I want to be what people don't expect and still more
than what  I am. 
I want to be sunkissed with my loved one at my right.
I want to dance nights and nights without getting tired.
I want to see the face of my mom and dad full of proud just 
because of what I am and what I'm not.
I want to feel without judgments and love people just because.
I want to learn everything I can. And beyond than what I can.
I want days full of laughs and stomachaches because of it.
I want to swim naked just because I want to. And can.
I want to lose myself in music. 
I want to lose myself in museums, learning, watching.
I want to be lost in time.
I want to go far far away just to forget. To feel. To think (more). 
To grow. To experience. To learn. To live.
I want to study and be successful. 
Make my parents, my family proud with tears in their eyes and my diploma on my hand.
I want to cry and cry, cry. Sit and cry. 
To not sleep because I'm crying. To be feeling and crying. For everything, for nothing.
I want to make a change in my life. 
I want to make a change in the world I live in. 
And make people be concious and teach them to take care of the world.
I want to belong to art. 
I want to be inspiration to someone, to those that need it. To those who want it. 
I want to play for days just like a little kid. Just as I do, still. 
I want to fill the spaces in blank. Doesn't matter the context. (?)
I want to be company and light to those who feel darkness and loneliness.
I want to met strangers with story on their backs, scars, tears, 
good days and stories to tell that become my friends.
I want to talk to people with whom I can learn from: Anything, something. Whatever it is but that makes me think about, that have a message....

Of the many (or tons?) of things I want to do, to be, to make... There was this. 

Journeys begin with a list og whishes and thoughts. 
That's why I know, this is just the beginning of (one of the many) journeys life has prepared for me. 

I want to lose myself in myself.

jueves, 19 de noviembre de 2015

El hubiera que no existe

Hubiera querido que te quedaras.
Hubiera querido que estuvieras, aquí, conmigo.
Hubiera querido que fueras tú el que se robara los recuerdos, las risas.
Hubiera querido que fueras tu el que me lloraras.
Hubiera deseado saber la fecha exacta de nuestra partida,
del adiós que dije y tú jamás pronunciaste.
Hubiera querido abrazarte. Como la primera vez; como la última vez que no te abracé.
Hubiera querido que no terminara. Así. Tan de repente. 
Tan efímero fuimos pero tanto que fuiste.
Hubiera querido ser para siempre.
Hubiera querido ser diferente. Para ti, para mí, para ambos.
Hubiera querido ser valiente. Más por mí que por ti… Ahora mucho más que nunca.
Hubiera querido besarte. Un beso de despedida, un último beso, ese que me negaste. 
Hubiera querido no llorar. Nunca. Por ti ni por nadie.
Hubiera deseado saber si pensabas en mí.
Hubiera deseado saber si alguna vez me lloraste. ¿Lo hiciste? Creo ya saber la respuesta…
Hubiera deseado entenderte, saberte;
Creí hacerlo pero alguna vez dijiste que eras alma libre, indomable…

Hubiera, yo hubiera… qué no hubiera…

Hubiera querido entenderte pero no hubiera podido.
La verdad, sigo sin entenderlo y sin entenderte a ti. 
Y, para ser sinceros, ni yo me entiendo.

Sobre todos los "hubiera", hubiera querido que estas palabras las dijeras tú;
No la que escribe, sino yo
Por eso, éste es el hubiera que no existe porque nunca las dije. 

Por cobarde. 

martes, 6 de octubre de 2015

Ironía para tus ojos


En medio de todos nuestros juegos, de eso que ya ni sé como fue que empezó o que ésto empezó, me gustaba el hecho que todo fuera competencia: quién era el más listo, quién era el más cortante, quién podía llegar a ser el más pedante y al final, quién era el que cedía escribiendo al otro; aquel que terminaba buscando al otro.

En medio de todas nuestras pausas por dejarnos, de nuestros "adiós" que se repetían constantemente, me gustaba que estuvieras para mí siempre. Aun si yo era pesada contigo, aun si era caprichosa, aun si decía que no te quería... aun así, me gustaba que ahí estabas, cualquier cosa: tú, para mí.

En medio de nuestros arranques de cólera, de levantarnos la voz para ser el que mandaba, el que estaba a cargo, me gustaba tu actitud. En general. La forma en como tratabas a los demás, la forma en como te creías el rey del mundo, la forma en que todo era simple por que decías "no es para tanto", la forma en como andabas por el mundo, la confianza que te es innata.

En medio de todos los "no" y "si", que por cierto, fueron más no que si, que fueron más "no quiero salir contigo" y tus llamadas diciéndome que estabas fuera, esperándome; me gustaba verte manejar, cosa tonta, pero era la forma en como podías manejar y escuchar lo que yo hablaba, la manera en que me prestabas atención, tu carita seria y tus ojos acechantes al volante.

En medio de nuestros pleitos por cualquier cosa, por la actitud del otro, por la forma de tratar el uno hacia el otro, me gustaba que siempre regresabas. Y, yo estaba ahí. No sé si esperándote o siguiéndote el juego, pero estaba. 

En medio del sarcasmo de cada uno, de lo salvaje que podías llegar a ser conmigo y la forma de bromear tan pesada. me gustaba que fueras sensible conmigo; Que sabías como ser sensible conmigo. Que eras lindo cuando querías. muy lindo; que me tratabas muy bien a pesar de mis malos tratos, de mis malos ratos.

En medio de nuestras preguntas y respuestas, de lo que nos dijimos y nos callamos, me gustaba tu risa. La forma en que podías reír así por así; la manera en que cantabas (esas tus detestables canciones de reggaeton, que no sé como es que te las podías todas) en el carro y yo como la seria, haciéndome la que no me quería reír. Me reía contigo, nunca quise burlarme ni reírme de ti. 

En medio de mis mentiras, de mis verdades, de tus insistencias y reclamos, me gustaba hablar contigo. Aunque fuera por un rato. Que siempre me hablabas aun si era solo para saber como estaba.

En medio de evitar, reírme un poco y tener ganas de contestar tus llamadas, me gustaba que me llamaras. De verdad. No llamada de WhatsApp sino, llamada de teléfono. como era antes.

En medio de nuestras distintas formas de pensar, concordábamos en muchas otras: el mundo es mundo y la vida es corta. Creíamos uno del otro, aunque habían ciertas dudas. Aun con nuestras cosas, creíamos. Queríamos. Fuimos. mas sin ser.

En medio de lo que era bueno y malo, de lo que era correcto e incorrecto, me gustaba la manera en como podías persuadirme, en como jugabas con mi mente y como yo me hacía la tonta, te seguía el juego haciéndote creer que ganabas. Decías que era difícil convencerme pero que sabías que lo lograrías y tengo que aceptar, que dos veces sí me ganaste...

En medio de nuestros "no me importas" y la indiferencia de cada uno, me gustaba saber que te era importante. Sea verdad o mentira, tu preocupación hacia mí, me gustaba.

En medio de las miradas, de los besos que nos dimos pero que nunca fueron, de las palabras que se dijeron y quedaron volando, me gustabas. Como eramos, como fuimos sin querer serlo, como intentamos ser y no se pudo.

En medio de nosotros, de todo, me gustaba y a la vez, no, como me hacías sentir: querer abrazarte, besarte, reírme contigo parta luego, por algo que decías o hacías, querer gritarte, pegarte, hacerte berrinche. y que aun así después, estuviéramos como si nada había pasado.

En medio de tu forma de hablar y tratarme, me gustaba que no te importaba si ocupaba maquillaje. Que me veías tal cual y te parecía atractiva aun así. "Mejor natural" me dijiste una vez y me sonreíste de manera tan tuya...

En medio de tus cigarros, de mi repudio al olor del cigarro y los regaños que te daba sobre fumar, me gustaba esa imagen de bad-boy-I-don't-care-what-others-say con tu cigarro en la boca. 

En medio de tus sonrisas picaras y tus pensamientos que te delataban, me gustaba como me sentía contigo. Pero cuando lo pensaba mucho, me dejaba de gustar. Eso me gustaba también, que contigo no había mucho qué pensar. "Lo importante es estar, me han enseñado" me susurraste una vez al oído...

En medio de tus (supuestas) buenas intenciones conmigo, sí las llegué a considerar. Te soy sincera. Pero tus acciones me ponían a dudar. Eras tanta contrariedad: Palabras bonitas pero vacías, acciones lindas pero malos ratos, temperamento arriba y abrazos luego.

Éramos tóxicos, éramos antídoto. El uno para el otro. 
A lo mejor sí eramos pero no en ésta vida. 

Me hacías sentirme bien cuando mi conciencia me decía lo contrario, que era incorrecto; que nosotros no deberíamos y aun así, intenté y llegué a ignorar lo que mi mente me decía.
En medio de todo lo que fuimos y no volveremos a ser, te conocí. Una parte que no había conocido antes y llegué a sentir cosas por ese pedazo de persona que eres, que puedes llegar a ser si lo quisieras, que me gusta creer que solo lo fuiste conmigo como lo eres contigo. Aquel que no le enseñas a nadie, no a cualquiera. Ése, ése pedazo que me lo guardaré como recuerdo. 

Y, es que se me dio por escribirte. Sin qué ni para qué.
Y, aunque me dije que no te consideraría importante, quizás si lo fuiste al final pero es hasta hoy, 
que lo acepto.




(Para Tus Ojos verdes, aquellos que tanto me gustan y recordaré siempre.)

martes, 25 de agosto de 2015

Pausa: La cosas que me digo y te cuento

Dejé de escribir por un tiempo. 
En ese período, viví para escribirlo después, como lo hago ahora. Y, me di cuenta de un par de cosas sin ser esa mi intención:

1. Todo en esta vida tiene un porqué, un significado. 
2. Las veces que me he perdido son las veces que más me he encontrado a mí misma... Me es necesario perderme de vez en cuando. 
3. No todos los finales son tristes.
4. ...Ni todas las despedidas saben a final.
5. Uno no olvida: Supera. Olvidar es para cobardes, a mi parecer.
5. La memoria no borra: Esconde.
6. Negar los errores no sirve de nada. Es más, los empeora. Por lo cual, es otra forma de ser cobarde. Considero que he aprendido de mis errores para que no vuelvan a pasar.
7. El amor es libertad y aquel que no ama en libertad, no ama. Ahora más que ayer, lo creo así. Y ahora sé, que no todos lo ven así. 
8. Para amar a alguien es necesario amarse a sí mismo. Sin duda alguna, incondicional. 
9. Uno no pierde amigos; aprende quienes son, fueron y serán. 
10. Es necesario equivocarse como es necesario cambiar. El que no se equivoca no aprende y el que no cambia, se extingue. 
11.Las personas que se hacen víctimas hacia y/o para los demás, han de ser víctimas de sí mismos, según yo lo pienso. 
12. Todo llega cuando tiene que llegar; ni un minuto menos, ni un segundo más. 
13. Para saborear la felicidad, se tiene que haber probado la tristeza. Sólo así sabe mejor.
14. Los malos momentos son necesarios en la vida. 
15. Dios tarda pero no olvida. 

martes, 28 de julio de 2015

¿Vivo o sobrevivo en El Salvador?

Vivo en un país impune. Impune para aquel que mata o comete un delito similar, un delito muy grave. (¿Grave según quien?)

Vivo en un país que se mueve por dinero: sobornos, el que de más, el que pueda pagar más.

Vivo en un país en donde la violencia y la muerte son noticia todos los días, a todas horas; muertos aquí y otros, allá.

Vivo en un país que a cada instante pierde sensibilidad. Esa, la poca que nos queda.

Vivo en un país que se entrega al mejor postor; un país en donde de un cargo público, se puede amasar fortuna a partir de los fondos estatales. (Entró debiendo y salió hasta con propiedades.)

Vivo en un país en donde se crean leyes que perjudican a todo aquel que trabaja, imponiendo decretos y subiendo impuestos; queriendo sacar dinero de donde no hay, de donde no alcanza para pagar.

Vivo en un país que tiene memoria a corto plazo. Surge un escándalo pero éste se olvida hasta que aparece otro y así sucesivamente, superando a veces, al anterior. Lo que fue noticia hoy, pocos lo recordarán el mes siguiente.

Vivo en un país en donde la gente muere a causa de la delincuencia y, lo único que hace es lamentarse por la pérdida. Llorar, solo eso nos queda. Ah, no se diga de la resignación.

Vivo en un país con más de seis millones (y disminuyendo, ¿o creciendo?) de salvadoreños en una extensión territorial de  20, 742 km² con un promedio de 20-24 muertes diarias. Por violencia. Por delincuencia.

Vivo en un país corrupto. Cualquiera puede lavarse las manos, cualquiera puede comprar al otro; cualquiera puede presentar pruebas y ni así, hacer valer justicia.

Vivo en un país que crea leyes que benefician a unos para perjudicar a todos. ¿Adónde quedó el dicho: o todos en la cama o todos en el suelo?

Vivo en un país en el cual, si se avanza un paso se retroceden tres.

Vivo en un país en el cual todos opinan lo que se debería de hacer, lo que se tiene que hacer pero nadie lo hace y que se le ponen obstáculos tras otro, a aquel que lo intenta y/o hace algo por salir adelante.

Vivo en un país en el cual el lema de su bandera es “Dios, unión, libertad”, pero que no lo aplica. 

Vivo en un país en donde se justifican las leyes, la corrupción, la probidad y la impunidad. Todos se quejan, nadie hace nada.

Vivo en un país en donde (algunos) funcionarios hablan de transparencia pero no la demuestran. ¿No sabrán que las palabras van acompañadas de acciones, si no, solo son palabras?

Vivo en un país en el cual sus procesos electorales pueden llegar a tardarse un mes y medio en el conteo de votos (¿quién se acordaba de eso?), que se tira la culpa el uno al otro (aprendió a lavarse las manos), sube costos y no puede justificar sus excesivos gastos (¿para qué quieren 900 millones: para endeudar más al país?)... Me pregunto yo, ¿será falta de organización o ineptitud?

Vivo en un país en donde es “normal” que te roben y si no te ha pasado, sos de los pocos (y contados) suertudos.

Vivo en un país en donde procesan a aquel que se robó una gallina o una vaca pero al que roba millones y descuartiza personas, no. Menos mal que todos somos iguales ante la ley, según la Constitución pero, ¿a quién le importa la Constitución? O sea, ¿quién lee la Constitución?

Vivo en un país que tiene como presidente a un ex-guerrillero, experto en detonación, en dinamitar puentes (¿acaso fue usted el que destruyó  del puente de Oro?), que quemó la bandera de Estados Unidos (iUy! ¿Todavía hay quien se acuerde de eso?) y ahora le pide a medio mundo que invierta en su país; un presidente que se jacta de decir que los medios de comunicación crean una “guerra psicológica” al presentar sólo malas noticias de El Salvador , que los medios son los que infunden el miedo a la población, que no hablan de las buenas obras que está realizando el gobierno (hey, ya no me acordaba de eso). 
Resulta que no se puede tapar el sol con un dedo.

Vivo en un país que comete los mismos ¿O, más grandes? Errores del pasado. Un gobierno que cree y continúa ocupando las mismas tácticas y estrategias de la década de los 70’s, ignorando que existen redes sociales ahora y veracidad que no había en aquel entonces, en los medios de comunicación. (Yo de verdad creí que iba a ser diferente, les di el beneficio de la duda mas no voté por ustedes).

Vivo en un país que tuvo un gobierno y hasta políticos  que han pactado con delincuentes, asesinos, extorsionistas y quien sabe qué más… Un país ¿o un gobierno, una figura pública? que no importa lo que suceda mientras no le pase a un alto funcionario. ¿Qué no han visto la historia de Colombia con el narcoterrorismo? Así estamos. 

Vivo en un país en el que tengo que desconfiar de todo y de todos. No puedo caminar sin sentir que me harán algo, bendito Dios si solo me robaran lo que ando. 

Vivo en un país en donde llegar a mi casa después de un largo día sano y salvo, es un alivio. Si es que no, milagro. 

Vivo en un país que dice no estar en guerra cuando es lo contrario: Se siente en guerra y está en cualquier parte, ya no en las afueras de la ciudad, en el pueblito; no. 

Vivo en un país que suda trabajo y a veces, su pago es en sangre. 

Vivo en un país donde no hay que decir nada, hablar nada porque no has visto ni oído nada.


Entonces, me pregunto, ¿yo vivo en mi país o sobrevivo en mi país?

Estoy en  un país que vive con miedo pero sobrevive con esperanza. La esperanza de salir de donde estamos, de un verdadero cambio y que éste no sólo sea el eslogan de una campaña política.
Mi país cree en la esperanza, yo (todavía) tengo fe. Se puede salir adelante pero debe de ser todos juntos, unidos.

Alberto Masferrer escribió hace ya un siglo atrás en “Leer y Escribir”:

“… Lo que nos falta, en lo que esos hombres del norte (refiriéndose a Europa) nos son marcadamente superiores, es en fraternidad, en solidaridad. Nos han criado en el egoísmo, hemos crecido en él, lo hemos incrustado en nuestro espíritu como ideal de sabiduría, hemos hecho de él la regla por excelencia de nuestra vida práctica.”

Mi país se profesa a sí mismo y a todos que,  “la fuerza hace la unión” y no al revés.  No se puede y no se debe de seguir creyendo lo que es ya del pasado. Mi país necesita unión y libertad, como reza la bandera. Empezar a ser un todo por un todo, dejando de lado los individualismos para alcanzar el bien común de quienes lo habitan: Nosotros, los salvadoreños. 

Tal y como lo creyeron nuestros padres de la patria en 1821: Ellos creyeron, se unieron y erigieron un país que no fuera dependiente de nadie más que de sí mismo. Más que un país, construyeron una nación.

Yo creo en mi país.
Aun con todo lo anterior, con todo lo malo, yo creo. Creo en que se puede avanzar sin retroceder. Creo que se puede salir adelante. Creo en esas personas que quieren hacer de El Salvador un mejor país, en aquellas personas que tratan, que se esfuerzan, que ponen de su parte. Sé que se puede. Hagamos que se pueda.

No quiero huir de mi país. Quiero estar aquí y ser parte de la solución; quiero ayudar, ser útil.
Se necesita, se debe de tener un objetivo, una visión para hacerla realidad: Saber hacia donde se quiere ir.
Yo anhelo y sueño que todo el mundo pueda ver la magnificencia junto a la belleza de país en cual nací, en donde crecí. Y más que soñarlo, quiero cumplirlo. 

Quiero cambiar la percepción y el concepto que se tiene de El Salvador internacionalmente: Que se sepa apreciar los valles, montañas, cañales, maizales, fincas… Valorar el esfuerzo y el trabajo de la gente que lo habita, de la gente que quiere que mi país, que el país mejore. Y sobre todas las cosas, dar a conocer al mundo y reconocer nuestra gran virtud: Echarle ganas, sonreír a pesar de lo malo. Exaltar esa virtud que sólo los salvadoreños poseen para que sea conocida mundialmente.



¿Por qué no hace usted lo mismo, señor Presidente? O, por lo menos, ¿trata de hacer “algo”, aunque sea? ¿Su gabinete qué dice? ¿Los señores diputados que dicen, que hacen?

Un país en donde los más de 6 millones de salvadoreños se levanta cada día con la ilusión de que será un mejor día: En el trabajo, en la escuela, en el bus, en la calle, en el puesto del mercado… Un mejor día en el que no  tengan que oír/leer/saber/ver de algún muerto, algún desaparecido, algún ataque a la policía y más y más. Un día que va a dejar de ser “algún día”, un día que va a llegar.

Tal día, mi país será El Salvador que merece y tiene que ser.

jueves, 23 de julio de 2015

Quien soy

Yo soy esa que se lava la cara para quitarse el maquillaje porque al pasar del tiempo siente que le estorba, que le pesa.
Yo soy esa que no le gusta que llueva porque le hace pensar más de lo usual.
Yo soy esa que cuando de verdad está triste y cuando de verdad está feliz, escucha (y se refugia en) música clásica.
Yo soy esa que llora por lo menos una vez al mes.
Yo soy esa que puede llorar por todo, por nada.
Yo soy esa que se siente tan grande y tan pequeña a la vez.
Yo soy esa que sueña despierta deseando cumplir sus sueños.
Yo soy esa que cuando no quiere pensar, prefiere ver televisión.
Yo soy esa que ríe y sonríe aunque no me sienta siempre así por dentro.
Yo soy esa que puede pasar toda una noche entera leyendo.
Yo soy esa que vive, muere, cae y se levanta.

Yo soy esa que escribe: Yo soy yo, quien soy. 

domingo, 28 de junio de 2015

Pendiente


                               «...Y, se quedó conmigo aún cuando le di más de mil razones para irse».



Acostada, pensativa y escribiendo la encontré. Me vio entrar, me levantó la mirada y me acerqué a ella apartando la libreta en la que escribía. La abracé. Sin decirle nada diciéndole todo.

Ella se dejó, me abrazó y me volvió a mirar. La besé. Ella sonrió y la abracé apretándola hacia mí; yo le sonreí.

—Gracias. -Me dijo.

Ella sonrío, no sé si para mí o para sí misma y me dio un beso.
Ahí, exactamente en ese instante entendí que ella era para mí; que no se iría, que se quedaría por siempre: Comprendí que la amaba.
La miré nuevamente y me sonrió como si fuera la primera vez.

Yo sonreí mucho más.

sábado, 27 de junio de 2015

#28

You and I are not memories.
You and I are not past.

I take you with me, you breathe with me. 
You are the body and I'm the soul. 
We make love. Together. Both.

You'll be with me... as you are now. 
Because you don't forget someone, you learn how to live without it. 

lunes, 22 de junio de 2015

Doce

A mí.
Que estoy tan llena de sentimentalismo aunque no lo parezca a simple vista.
A mí.
Que me adentro tanto a los recuerdos, momentos que ya pasaron.
A mí.
Que pienso y planeo para el futuro sin olvidar vivir el presente.
A mí.
Que me hago la indiferente pero a veces mis acciones son contrarias.
A mí.
Que no creo en un adiós sin historias qué contar.
A mí.
Que observo mucho más de lo que veo.
A mí.
Que me quedo sin palabras cuando estoy más llena de sentimientos.
A mí.
Que prefiero recordar como fue una persona en vida que recordarla muerta.
A mí.
Que tengo la creencia que nadie muere realmente mientras se lleve en la mente.. en el corazón.
A mí.
Que siento más de lo que lloro.
A mí.
Que me desenamoro más de lo que me enamoro.
A mí.
Que me encierro entre puertas y sólo (a veces) dejo la ventana abierta.
A mí.
Que tiemblo con lo que puedo llegar a sentir, a ver, a conocer, a pensar.
A mí.
Que tengo abrazos que abarcan una vuelta al mundo.
A mí.
Que hago lo fácil, (sea) complicado.



"No soy lo que lees, soy lo que tú sientes al leerme". -Anónimo 


domingo, 21 de junio de 2015

#88

I can feel how the world trembles around me.
How echoes and tears of joy plus fear can be heard from distance.
How bodies and souls can be combined and be separated at the same time.
I can feel how the world goes on with evil and good being done.

I can feel tons more of what I see.
And it's not only seeing, is feeling. Is being.

#46

I don't believe in ghosts but I believe in you. 
I believe you are with me, deep in my heart. 
I can not see you but I feel you; your presence is here.
It has always been felt for me.

I really don't know if you are here with me but I like to believe that you do:
You promised you would. 

martes, 26 de mayo de 2015

Infinito

Existen miradas que se guardan en el alma, en lo más profundo e íntimo de uno mismo. Besos que se quedan tatuados con tinta invisible y abrazos en los que caben galaxias, que rompen distancias. 
Hay distintos tipos de amor pero nunca se repiten. Hay corazones rotos y personas que son hilo y aguja. 
Existen amigos que son todos en uno y amores en los que todo ha sido uno; Libros con respuestas y preguntas que son dolores de cabeza. Sueños que se vuelven pesadillas y realidades que se vuelven sueños. 
Hay mundos dentro del mundo y cada cabeza es también un mundo; Ojos que hablan más que las palabras pronunciadas y acciones que dicen más de lo que se habla. 

Quiero ver con mi boca; quiero reír con mis manos, nutrirme a besos y sonreír con la lengua.
Quiero caminar sin pies, volar sin alas; andar descalza para vagar por el camino y ser turista de la vida. Desgastar mi cuerpo haciendo lo que me haga feliz. Ser feliz. Ser libre. Soy libre. 
Y, ser yo: Quien soy.  

martes, 31 de marzo de 2015

Of my mistakes and you

I don't remember our last kiss;
I hardly have a faint of our first.

Either way, I keep you inside myself and you're deeper in my mind.
For a time, I had prohibited myself to think or remember you; I wasn't allowed to. It wasn't good for me and giving it a thought, still remains bad.
I shouldn't be thinking of you in ways, in all the ways and times how only you could make me feel. But here I am: Wishing for you. No, wanting you.
I desire you.
But not as those memorable times I already had, not anymore. I desire you desire me as you never had before: I want you to be confused and thrilled about it, thinking of me in the sweetest and kinkiest forms... I want you to feel as I ache inside you, as you crave for me. As I hurt you feeling like I used to feel for you.

I want you to feel what I felt.
But I don't want you to have me and I don't want to have nothing with you.
Not anymore.

lunes, 23 de marzo de 2015

Sin pedir

Te di mis tristezas y las convertiste en alegrías.
Te di mis abrazos y los convertiste en besos. 
Te di mis letras y las convertiste en canción.
Te di mis deseos y los convertiste en pasión.
Te di mis caricias y las convertiste en amor.

Te he dado y me has entregado.
Me has quitado para darme más.

Todo sin pedir, todo por que nos nace.


lunes, 16 de marzo de 2015

Letting you go when I remember you

There was something else that 
our eyes couldn´t see 
There was something else that 
we couldn't reach
We thought it was impossible;
Truth is, we didn't try.
I pictured myself with you,
my life...
You didn't realize
Perhaps you didn't care
I don't know why I'm looking for answers
When there weren't any doubts at all:
It was obvious; 
But I just couldn't look at it, 
I was blind. 

Time passed
Time flew
Memories left, some memories stayed
Couldn't see you but you were here
Couldn't touch you but I felt you;
You weren't here physically but 
Your presence was

There are things I notice now
Things I didn't see back then
And I do now.
I don't regret what we were 
neither having you in my life;
But, it's time to start again. 
I'm releasing all my ghosts with you. 

jueves, 5 de marzo de 2015

Yo, conmigo

Se ve lo que se quiere ver.
Si yo quiero ver las cosas como no son, las veo así; Yo decido como verlas. Pero no todos ven las cosas como son: unos exageran y otros le restan.
Debo de empezar a ver las cosas como son o... Cómo yo quiero que sean? Creo que es un poco de ambas.
Qué mal que no todo sea como lo escribo, como lo espero, como lo imagino, como quisiera pero para eso están los sueños. La realidad siempre será cruda y se tendrá que aceptar.
Un pedazo de mí quisiera que las cosas no cambiaran pero, de toda la persona entera que soy, sólo un pedazo quiere eso? Qué egoísta. O realista? Creo que es ése pedazo que todavía no acepta las cosas como son ahora y como han cambiado, ése pedazo que siempre está en nosotros y pide regresar en el tiempo y arreglar lo que salió mal. Entonces, acepto. Acepto como serán las cosas y como han cambiado; me he dado cuenta de las cosas que ignoraba, acciones que dejaba pasar antes y ahora son grandes, actitudes pésimas que pensaba cambiarían así por así, personas que decía llamar mis amigos fingiendo ellos el serlo, palabras que pretendía no me dolían y conversaciones que llegué a olvidar.
Me doy cuenta y me duele. Pero duele más fingir... Hacer creer que por ratos no me desmorono y pretender que no me importa, que no me importa como ha cambiado mi vida para bien y mal....
Lo peor? Que los demás no pongan de su parte. Ellos también pretenden como yo.

jueves, 12 de febrero de 2015

No soy la única


Quiero escribir para no morirme;
Quiero escribir para seguir.

A veces me siento sola. Incomprendida. Aterrada. Triste. Frustrada. Dudosa. Llorando por todo y nada. Con miedo.
A veces me siento feliz y de verdad soy feliz teniendo la vida que tengo con lo malo y complicado, me enseñaron a valorar lo bueno y simple.
No soy la única en el mundo que se debe de sentir así: Sin saber realmente cómo ni qué siente.
No pierdo esperanzas, no me dejo vencer. Caigo para levantarme de nuevo. Estoy creciendo y a la vez, aprendo. Comprendo.
A pesar que por ratos me sienta perdida y que no me siento con un lugar en el mundo, pienso que estoy donde tengo que estar. Por algo.
Algo que todavía ignoro pero más adelante, sabré.
Sin embargo, aquí estoy: Viva.
Aunque a veces muera.
Estoy.
Y sigo.

miércoles, 11 de febrero de 2015

Nyctophilia

...Y, así fue como una noche más me di cuenta de lo mucho que me gusta quedarme despierta en la madrugada. Sólo a escuchar el silencio de la noche y todo el estruendo de mis pensamientos.

Saber que habrá un amanecer,
Saber que todo va a mejorar.
Hay cosas que en el día no las veo y en la noche, sí. Cosas que se ve vuelven visibles al apagar la luz y encender la de mi alma. 
Dormir no me basta si no sueño.

viernes, 30 de enero de 2015

Utopía


Un día me voy a ir. Lejos.
Tan lejos que no habrá quien me encuentre; tan cerca que todos querrán visitarme.
Un día me voy a ir. Lejos.
Lejos para ver quien me extraña.
Lejos para ver quien me busca.
Tan lejos pero lejos que sólo en mi cuerpo y espíritu existiré.
Un día, tal vez uno de éstos, me iré.
Lejos. Tan lejos que ni yo sé donde está.

martes, 20 de enero de 2015

Fugaz


Simple y sencilla
Pero siempre complicada.
Corta y expresiva
Aunque larga y repetitiva a ratos.
Soñadora y alegre
Pero triste por instantes.
Fugaz e infinita.

martes, 13 de enero de 2015

Mucho es poco

Me gustas porque puedo hablarte de mí y me entiendes como yo a veces, no me entiendo.
Estás conmigo sin darte cuenta; te has metido en mí y te encuentro sin buscarte en todo lo que veo y leo.
Me gustas porque puedo ser buena y mala contigo aunque me haces querer ser ambas.
Te quiero contar y preguntar tanto que hasta sin voz y respuestas te quedarías.
Me gustas porque sabes qué decirme, cómo decírmelo y cómo hacerme sentir sin ser esa tu intención.
Me pones nerviosa; lo admito.
Y me gusta. Sólo contigo me pasa.
De un tiempo para acá, has sido actor principal de mis sueños y cuando he reído, has patrocinado mis sonrisas.
Has sido respuesta y afirmación;
Amor y seducción.
Me gustas.
Me gustas porque contigo quiero que sea lo que con nadie más no.
Me gustas porque tu mirada dice lo que tu boca no... pero que yo sé.
Me gustas porque quiero ponerte y darte, quitarte y hacerte.
Me alegras, me llenas.
Me gustas y te gusto.
Me haces sentir. Tanto.
Tanto me haces sentir que, mucho es poco.
Y, me gusta.

domingo, 4 de enero de 2015

Sin margen de error

Solía creer que la oscuridad me daba miedo... pero no, no realmente es así. Me he dado cuenta que lo que me da miedo es la oscuridad de mi mente: Los pensamientos que puedo llegar a tener mientras estoy a oscuras acostada en mi cama despierta por las madrugadas.
Es mi mente a la que, a veces le tengo miedo; porque juega conmigo misma, porque conoce y sabe mis verdaderos y más íntimos miedos guardados ni yo sé donde.
Mi mente puede jugar conmigo, puede hacer de mí, miseria.
Si yo lo permito, si yo dejo que pase.
Puedo conmigo y con todos mis miedos.
Aunque a veces no lo crea y no lo sienta así, muy adentro de mí sé que puedo.
No me voy a dejar vencer por mí misma.

sábado, 3 de enero de 2015

Para mí


Quiero que me conozcas como nunca antes, quiero que me conozcas como nadie jamás.
Quiero que me descubras y nos asombremos juntos.
Quiero hablar contigo sin pronunciar palabra y que me entiendas.
Quiero que seas fuente de inspiración, quiero que seas la mía.
Quiero jugar con la suerte y terminar contigo;
Me quiero a mí conmigo.